miércoles, 4 de enero de 2012

La historia de mi vida

Entonces resulta que son todos ratitos. Todo dura un rato, menos yo que soy para toda mi vida.
Se va escribiendo de a pedazos sobre una hoja que soy yo.

Pero en los espacios en blanco qué.

No quiero terminar el párrafo, o ya quiero que llegue el que sigue. Pero sola no.
Sola me pongo a llorar y pienso.

No me encuentro, o no sé qué estoy buscando.

Hola, soy yo. ¿Y qué hago?

Entonces reescribo todos esos pedazos que me gustaron.
Les hago notas al pie y sonrío. Los espero de vuelta.

Hay gente que es muy linda y me escribe muy bien. Me deja muchos párrafos para sentir otra vez.

Pero ahora no tengo ganas de nada y no puedo dejarme en blanco.

Qué sé yo.

1 comentario:

  1. Tenés que leer el libro de Clarice Lispector que estoy leyendo en este momento, me parece que te va a encantar !

    Me encantó!
    Me dan ganas de decirte algo que se me ocurrió leyéndote y es que somos muchos yoes a lo largo de toda la vida... Y también somos esos espacios en blanco...

    Eso, nada, unos rulos al viento que cruzan la autopista a estas horas de la madrugada...!

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